Este gráfico de la consultora de Orlando Ferreres parece reflejar una distancia creciente entre las condiciones remunerativas de los asalariados metropolitanos y la posibilidad de acceder a una vivienda propia. No conozco las fuentes de información.
Da la impresión que el costo de la vivienda creció mucho más que la mejora salarial en el mejor período de recuperación del salario (2002-2007) y luego declinó de manera importante (pero mucho menos que la suba precedente) en el lapso pos crisis 2009 hasta la instalación del cepo cambiario y la potenciación inflacionaria.
hay cosas que se entienden y otras que quedan en dudas.
Pero, a menos que se muestre que estos datos son erróneos, impacta no tanto por lo acontecido en los dos mil sino por el contraste con la segunda mitad de los noventa.
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