En 10 provincias, más del 35% de los ocupados son estatales
El sector público compensó la menor creación de empleo entre las empresas privadas.
Por ISMAEL BERMÚDEZ
En solo dos años el plantel de agentes estatales creció en 230.000 puestos. Y sigue subiendo. Ahora, en 10 provincias el empleo públicorepresenta más del 35% del total de asalariados de cada distrito. A la cabeza del ranking, con el 48% de empleo público, está Santa Cruz, seguida por La Rioja con el 47,1%. En el otro extremo, entre las que tienen la proporción más baja, están Córdoba y la provincia de Buenos Aires, con el 16,8%.
En promedio, el empleo estatal es del 23,3%, lo que equivale a casi 3 millones de asalariados. Esos datos nacionales anuales, que por tercera vez difunde el INDEC, son del tercer trimestre de 2012. Y como la expansión del empleo público prosiguió en los dos trimestres posteriores, mientras el empleo privado se estancó, se estima que ya roza el 24%. Así uno de cada cuatro trabajadores formales depende del Estado Nacional, de las provincias o municipios.
No obstante, otras cifras oficiales, de la AFIP y del Ministerio de Economía, informan que suman 3,3 millones los empleados en el sector público. No todo ese personal es efectivo. Una parte revista como “personal transitorio”, a plazos fijos, renovables, y otros están bajo distintos regímenes de contratos, lo que los coloca en una situación de precariedad laboral. A eso se agrega que la mayoría de los sueldos en las provincias y municipios se ubican muy por debajo del promedio nacional.
Si se excluye el empleo en negro, del total de trabajadores registrados (público y privado), un tercio trabaja en el sector público.
Con relación a la medición de 2010, cuando promediaba el 22,3%, la mayor expansión se dio en la Ciudad de Buenos Aires por el peso del Estado Nacional que incorporó en solo 2 años unas 40.000 personas – pasó de 447.716 a 486.194 empleos – y el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires de 130.655 a 135.176. El resto es responsabilidad de las provincias, en especial en Tucumán, Santiago del Estero, Catamarca y Chaco.
Esto coloca a los presupuestos públicos con una alta dependencia del pago de los salarios. En el primer trimestre, el sector público nacional registra 491.121 empleos y el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires 139.244.
La casi totalidad del incremento del empleo público no fue para actividades productivas sino para los sectores de servicios, en áreas sociales, de educación y salud, incluyendo la estatización del Correo Argentino y Aerolíneas Argentinas y el pase en 2008/09 de los trabajadores de las AFJP a la ANSeS y AFIP, a lo que se agregó la mayoría estatal en YPF. Si se compara con los años de la crisis de 2001/002, una parte del mayor empleo público se debe a la efectivización de planes de empleo. Por eso, muchos especialistas sostienen que si el empleo público no hubiera avanzado tanto, el desempleo se ubicaría varios puntos por encima del 7,9% o los 1, 3 millones de desocupados de la última medición nacional.
Javier Lindemboim, del Centro de Estudios de Población, Empleo y Desarrollo (CEPED-UBA) quien se manifiesta partidario “de un Estado activo pero eficaz”, no le asusta el aumento del empleo público en si mismo. Pero subraya “que el incremento reciente de la dotación de personal no es fácil verlo reflejado en más y mejor funcionamiento de la gestión estatal”.
Lindemboim dice que “mucho más serio es que en 2007 se haya interrumpido la época de oro en materia de creación de empleo” y ahora “no necesariamente el empleo estatal crece porque el Estado estaría buscando compensar el estancamiento del empleo privado”, ya que las tasas actuales de crecimiento del empleo público no son anormales, responden al crecimiento de la población activa. “El nudo de la cuestión es el freno del empleo privado y su doble incidencia, negativa en lo social, y potencialmente positiva sobre la productividad media de la economía. De todas maneras, el peso y las características del empleo público, en especial en algunas provincias, es de vieja data y obedece a factores estructurales de insuficiencia de actividad productiva”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si desea dejar un comentario hágalo aquí.